Ya llegué!

Aquí me ven, de vuelta a la encantadora rutina del buen día flaquet y el café con leche en la taza favorita de turno (ahora tengo dos tazas favoritas, la de Snoopy que me trajo Papá Noelio y la de Starbucks que me trajo el Papá Noel que vive conmigo), del qué tenés ganas de comer, del guarda que el gato se metió al ropero... el primer día siempre es confuso, con esta sensación de reencuentro con el entorno. Más confuso es estar en el aeropuerto, pensando si estoy contenta de volver o estoy triste de irme. En fin.

Regalos de bienvenida:

Se ve algo? Es una tazota de Starbucks (mis cafés favoritos! el venti de café mocha levanta cualquier tarde), un libro de Lemony Snicket (tengo toda la colección A series of unfortunate events), y uno de Neil Gaiman llamado Coraline, ilustrado por Dave McKean. Tengo para flashear en technicolor un rato largo!